Ingrid Morales: la primera entrenadora tica de voleibol en el extranjero
- Jennifer Aranda
- 3 ago 2021
- 4 Min. de lectura
Actualizado: 30 may 2022
Por Jennifer Aranda / biografiadeportivacr@gmail.com
Desde el mes pasado la exvoleibolista Ingrid Morales Muñoz fue contratada en Honduras como entrenadora. Es la primera vez que una persona centroamericana goza de esta oportunidad como head coach de una Selección Nacional de otro país que no sea el suyo.
Actualmente, cuenta con el título de Entrenadora de Voleibol de Playa Nivel 2 de la Federación Internacional de Voleibol (FIVB).
La josefina se inició en el voleibol sala desde los 18 años de edad y en playa desde los 23. Sin embargo, a partir de los 29 se dedicó solo a la segunda modalidad.
Su primera experiencia como voleibolista fue en Tibás por dos años, durante los cuales logró participar en Juegos Deportivos Nacionales. Más tarde, Morales jugó con el equipo Zapote, adueñándose por una década del título de campeonas nacionales.
Para el 2005, ya era parte de Santa Bárbara, con quienes de nuevo quedó como campeona. Otros equipos en los cuales también participó fueron Goicoechea (2006-2008 y 2014) y Universidad Nacional (2015-2019). Este fue el último grupo del que formó parte antes de retirarse definitivamente como jugadora en el año 2019.
"Uno no puede ser atleta para siempre, y yo lo tenía muy claro. Sentí que era el momento de darle el espacio a otra jugadora que lo podía hacer mejor que yo."
-Ingrid Morales
Durante toda su carrera deportiva, su esposo José Miguel Velluti Murillo, se convirtió en el mayor de sus apoyos al estar a su lado desde los 19 años cuando contrajeron el matrimonio que ha perdurado hasta hoy. De este vínculo afectivo que inició tres años antes con una fuerte amistad, nació Nicolás, quien también practicó voleibol.
Entre los muchos aspectos que Ingrid y José Miguel comparten, sobresale la Academia Ingridvolley, donde forman a jóvenes y adolescentes del Gran Área Metropolitana (GAM) en la disciplina del voleibol playa.
No es casualidad que la persona amable, accesible y cordial que es Ingrid también se haya decidido por estudiar Educación Especial, profesión que ejerció durante dos años, pues surgió una oportunidad que ella y Natalia Alfaro (primeras jugadoras profesionales de voleibol playa en el país) no podían dejar pasar.
Un patrocinio de Ferretería Brenes y Lanco les permitió dedicarse totalmente a esta pasión con la que había nacido o descubierto en el camino.
Su amor por el voleibol la llevó a visitar muchos lugares del mundo, entre ellos Holanda, Portugal, Chipre, Vienna; algunas islas como Caimán, Santa Lucía, Trinidad y Tobago, y Aruba. Además de Japón, donde se llevó a cabo el XV Campeonato Mundial de Voleibol Femenino en el 2006. De hecho, esta fue la primera vez que la Selección Nacional de Voleibol Sala de Costa Rica clasificó a un mundial mayor.
La atleta también tuvo la oportunidad de conocer casi todos los países de América, a excepción de Argentina, Ecuador, Uruguay y Paraguay.
"Como atleta, para mí, no hay comparación con representar a Costa Rica. Cada vez que yo escuchaba el Himno Nacional lloraba. Cuando teníamos la dicha de ganar una competencia y escuchar nuestro himno y ver la bandera en lo más alto para mí era sublime."
-Ingrid Morales
Su papel como embajadora era realmente significativo, supo darle el valor que implicaba y se apasionaba por serlo. Esto y compartir con otros para aprender, era lo que más le gustaba de ser atleta y todavía hoy al ser entrenadora.
Su infancia la vivió en Garabito de la León XIII, donde compartía con su mamá y sus tres hermanos. De los cuatro hijos de doña Isabel Muñoz Sánchez, Ingrid es la segunda y la única que se dedicó al deporte.
Aunque nunca vivió con su papá Miguel Morales, sí logró relacionarse con los nueve hermanos más que este procreó. Lamentablemente, don Miguel ya no vive, pero Ingrid supo ya de adulta unirse a quienes comparten con ella esa misma sangre heredada.
"Éramos una familia bastante humilde y con pocos recursos, pero esa situación donde mi mamá tenía que trabajar siempre, nos hizo cuidarnos entre nosotros y ser hermanos muy unidos. Nos hizo desarrollar características de gente resiliente, trabajadora y preocupada por otros. ¡Eso marcó mi vida!"
-Ingrid Morales
La pequeña Ingrid, extrovertida y llena de energía, se enamoró de las actividades físicas al encontrar en ellas un espacio donde explotar todo el potencial natural que le corría por dentro.
Pero Ingrid también sabía y sabe aún pasarla bien dibujando, haciendo manualidades y leyendo a grandes autores latinoamericanos como Gabriel García Márquez. Desde el colegio, se involucraba en todas las actividades posibles. Por eso, su imaginación y creatividad en conjunto con su simpatía la hicieron acreedora del apodo "Tosty" (como el lagarto).
Hoy a sus 46 años de edad, reconoce que el deporte le enseñó confianza en sí misma, curiosidad y valentía para no temer a hacer cosas nuevas o diferentes.
"A través del deporte he logrado conocerme más a mí misma, conocer mis fortalezas y mis debilidades, aceptarme tal como soy, y creer en mí y mis capacidades."
-Ingrid Morales
Otros logros de Ingrid Morales Muñoz:
Campeona Nacional en Voleibol Playa con Xinia Alvarado (2002) y Natalia Alfaro (2005 al 2013).
Campeona Centroamericana en Voleibol Playa con Ivette Alas (2003), Yanina Aguilar (2004) y Natalia Alfaro (2005, 2006, 2008-2013).
Entrenadora de la Selección Nacional de Voleibol de Costa Rica en 2011 para el Campeonato Mundial de Voleibol FIVB en Polonia.
Entrenadora de la Sub21 y Sub19 en el 2014 para el Campeonato Mundial Sub21 de Voleibol Playa en Chipre y el Campeonato Mundial Sub19 de Voleibol Playa en Portugal.
Asistente de Natalia Alfaro y Karen Cope en el 2014 y, posteriormente, entrenadora oficial desde el 2015 y hasta el 2017, año en que ganaron medalla de oro en los Juegos Centroamericanos de Managua.
Primera entrenadora centroamericana en clasificar a un equipo de voleibol playa o sala a Juegos Olímpicos. En esta ocasión los celebrados en 2016 en Río de Janeiro, Brasil.
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